William H. Bathurst
Por una Fe capaz, señor,
de soportar el mal,
que no vacile ante el furor
de fuerza terrenal.
Que no murmure en la ansiedad,
que crezca en el rigor,
y que en las horas de pesar
su apoyo busque en Dios.
Que resplandezca más y más,
del mar en el fragor,
y pueda siempre superar
la duda y el temor.
Señor, concédeme tal Fe
que pueda anticipar
la dicha que por fin tendré
en el eterno hogar.